Cientifica, Pionera en el campo de la radiactividad, fue la primera persona en recibir dos premios Nobel en distintas especialidades —Física y Química
Los estudiantes de la Universidad parisiense de la Sorbona, al cruzarse
en los pasillos con aquella joven polaca que se había matriculado en
otoño de 1891 en la Facultad de Física, se
preguntaban: "¿Quién es esa muchacha de aspecto tímido y expresión
obstinada que viste tan pobremente?". Todos la miraban extrañados, con
una mezcla de conmiseración y desdén. Algunos sabían que se llamaba
Manya Sklodowska y la denominaban "la extranjera de apellido imposible";
otros preferían llamarla simplemente "la estudiante silenciosa". Manya
se sentaba siempre en primera fila, no tenía amigos y sólo se interesaba
por los libros. También llamaba la atención su hermosa cabellera de
color rubio ceniza, que solía llevar recogida y semioculta. Nadie
sospechaba que esa joven esquiva y austera iba a convertirse un día,
bajo el nombre de madame Curie, en una mujer ilustre y una gloria
nacional de Francia.
Marie Curie, una mujer en el frente - Documental 4/7/19
Manya Sklodowska, que luego sería conocida como Marie
Curie, nació en Varsovia el 7 de noviembre de 1867. Era la menor de los
cinco hijos (cuatro mujeres y un varón) de un matrimonio dedicado a la
docencia: su padre era profesor de secundaria de física y matemáticas y
su madre directora de un colegio de señoritas. Su infancia estuvo
marcada por la coincidencia con un implacable período de rusificación de
Polonia, a causa del cual su padre hubo de abandonar el puesto de
subinspector que ocupaba en un instituto; las necesidades económicas le
obligaron a tomar como huéspedes a muchachos en edad escolar, a los que
daba también clases particulares.
Marie Curie (c. 1898)
|
La hermana mayor de Manya falleció en 1876, víctima de
una epidemia de tifus, y dos años después murió su madre a causa de una
tuberculosis. En 1883, una vez finalizados sus estudios secundarios,
Manya sufrió una depresión nerviosa de la que hubo de recuperarse
pasando cerca de un año en el campo, en casa de unos parientes. A su
regreso a Varsovia en 1884, dio clases particulares en su domicilio
junto con sus hermanas y asistió a las clases de la «universidad
volante» creada allí, al margen del sistema educativo ruso, por el
impulso de un círculo de positivistas inspirados en las enseñanzas de Comte.
MARIE CURIE pelicula completa en español 2017 .7/11/19
Las estrecheces familiares obligaron a Manya a empezar a
trabajar como institutriz; tras un primer empleo que resultó un
fracaso, el 1 de enero de 1886 entró al servicio de los Zorawski, una
familia acaudalada que residía en Szczuki, al norte de Varsovia, donde
Manya hubo de ocuparse de la educación de dos de las hijas. Allí tuvo
ocasión de llevar a la práctica los ideales sociales nacidos el año
anterior en Varsovia organizando una escuela para hijos de obreros y
campesinos a la que dedicó sus horas libres, con la complacencia de los
Zorawski; el resto de su tiempo lo ocupaba en el estudio de la física y
las matemáticas.
Marie Curie Radiactividad 21/12/20
Manya vivió entonces su primera relación sentimental con
el mayor de los hijos Zorawski, relación que se frustró posiblemente
por las diferencias sociales entre ambos; su condición nerviosa y
proclive a la ansiedad soportó mal el episodio, que vino a sumarse al
enorme esfuerzo desarrollado en su triple ocupación de institutriz,
maestra y estudiante, haciendo todo ello que, a los veinte años, se
convirtiera en una persona amargada. Cuando por fin terminó su contrato
en Szczuki, en el verano de 1889, regresó a Varsovia, donde trabajó de
nuevo como institutriz durante un año y reanudó sus contactos con la
universidad clandestina. Un primo suyo, que había sido ayudante del
químico ruso Dmitri Mendeléiev (creador de la tabla periódica de los elementos),
le proporcionó la oportunidad de completar sus conocimientos de química
en un pequeño laboratorio y la puso en contacto con otros
investigadores que habían conocido a los grandes científicos europeos de
la época.
El matrimonio Curie
En marzo
de 1890 su hermana Bronia, por entonces estudiante de medicina en París,
la instó a reunirse con ella; el trabajo de Manya había contribuido a
financiar la carrera de Bronia y entre las dos existía un pacto de
reciprocidad. Pero Manya rehusó, cayendo en uno de sus períodos de
melancolía. Año y medio más tarde Bronia reiteró la oferta; como los
problemas económicos de la familia se habían atenuado lo suficiente como
para permitirle disponer de unos ahorros, Manya decidió finalmente
aceptar. En otoño de 1891 se instaló en París, dedicándose en un
principio a poner al día sus conocimientos; en 1893 consiguió la
licenciatura en ciencias físicas y en 1894, ayudada por una beca, se
licenció en matemáticas. Los dos primeros años en París fueron de
aislamiento en el trabajo y estuvieron marcados por duras privaciones,
pero tuvieron la virtud de acabar con sus problemas nerviosos.
Pierre Curie |
En
abril de 1894 Marie, como ya se hacía llamar, conoció a Pierre Curie.
Nacido en París el 15 de mayo de 1859, Pierre Curie era el segundo hijo
de un médico humanista y librepensador que había permitido que sus hijos
se educaran al margen de la escolaridad tradicional. Junto con su
hermano Jacques, tres años mayor que él y a quien le unió una intensa
relación emocional durante la infancia y la juventud, Pierre había
estudiado física en la Sorbona. Los hermanos Curie habían investigado la
posibilidad de transformar la energía mecánica en energía eléctrica en
los cristales, publicando en 1880 su primera comunicación sobre el
fenómeno que después se conocería como piezoelectricidad; posteriormente
ambos demostraron también la posibilidad del efecto contrario
(deformación de un cristal por aplicación de una carga eléctrica) y
diseñaron un electrómetro de cuarzo piezoeléctrico para medir las
corrientes eléctricas de intensidad débil.
Historia La Radiactividad - Marie Curie Pierre Curie Henri Becquerel - Física 21/12/19
En 1882
Pierre fue nombrado jefe de laboratorio de la Escuela Municipal de
Física y Química, institución en la que seguía trabajando cuando conoció
a Marie y donde se había dedicado al estudio teórico de la simetría. En
1891 emprendió la redacción de una tesis doctoral sobre las propiedades
magnéticas de diversas sustancias en función de la temperatura, tesis
que presentó en marzo de 1895. Marie asistió a la lectura de la tesis y
quedó impresionada; su relación con Pierre Curie duraba desde hacía ya
doce meses, durante los cuales él se había mostrado más dispuesto que
ella al matrimonio. Finalmente se casaron el 26 de julio de ese año; en
1897 nació su hija Irene, a la que seguiría siete años más tarde otra
niña, Eva.
Foto de boda de Pierre y Marie Curie |
Tras el nacimiento de su primera hija, Marie Curie se
propuso realizar una tesis doctoral, hecho insólito por aquel entonces
tratándose de una mujer. El descubrimiento por Wilhelm Röntgen de los rayos X en 1895 y la observación realizada en 1896 por Henri Becquerel
de que las sales de uranio, aun protegidas de la luz, emitían rayos
que, como los rayos X, penetraban la materia, la decidieron a investigar
en su tesis la procedencia de aquella energía que el compuesto de
uranio empleaba en oscurecer las emulsiones fotográficas a través
incluso de protecciones metálicas. El tema poseía la ventaja de ser un
terreno todavía virgen en la investigación científica.
La radiactividad
El director
de Pierre Curie aceptó que Marie habilitase como laboratorio una
dependencia de la Escuela Municipal de Física y Química que servía de
depósito y sala de máquinas. Allí inició Marie Curie sus
investigaciones, utilizando el electrómetro inventado por Pierre y su
hermano para medir la intensidad de la corriente provocada por los
diversos compuestos del uranio y del torio, comprobando inmediatamente
que la actividad de las sales de uranio dependía solamente de la
cantidad de uranio presente, con independencia de cualquier otra
circunstancia.
FRASES DE MARIE CURIE 9/6/20
Desde el punto de vista científico, éste fue su
descubrimiento más importante, pues demostraba que la radiación no podía
proceder más que del átomo propiamente dicho, con independencia de
cualquier sustancia añadida o de una reacción química. Pero Marie Curie
no se entretuvo en meditar sobre este resultado; extendió sus
investigaciones a la pecblenda y a la calcolita encontrándose con que
eran más activas que el uranio. De ello dedujo la existencia en esos
minerales de otra sustancia nueva, responsable de esa mayor actividad.
Marie y Piere Curie en su laboratorio |
Con la ayuda de su marido, Marie Curie procedió a tratar
químicamente la pecblenda hasta obtener un producto que resultó
trescientas treinta veces más activo que el uranio: el 18 de julio de 1898 el
matrimonio comunicó sus resultados a la Academia de las Ciencias
proponiendo el nombre de «polonio» para el nuevo elemento, cuya
existencia confiaban en que fuera confirmada, y utilizando por vez
primera el término «radiactivo» para describir el comportamiento de
sustancias como el uranio.
Pero las investigaciones subsiguientes les hicieron
pensar en la existencia todavía de otro elemento nuevo en la pecblenda;
tras conseguir que el gobierno austriaco les facilitase la compra de
varias toneladas de residuos del mineral procedentes de las minas de
Saint Joachimsthal, dedicadas a la explotación del uranio, la existencia
del elemento que llamaron «radio», anunciada en diciembre del mismo
año, se vio confirmada; su peso atómico quedó establecido por Marie
Curie en marzo de 1902 como igual a 225,93.
Mientras tanto, en 1900 las preocupaciones financieras
del matrimonio se vieron relativamente aliviadas por el nombramiento de
Pierre para una cátedra de física en la Sorbona, por iniciativa del
matemático Henri Pincharé; Marie, por su parte, ocupó una plaza de
profesora de física en la École Normale Supérieure de Sèvres; sin
embargo, su actividad docente les robaba tiempo para sus investigaciones
experimentales. Tampoco disponían de facilidades materiales para las
mismas; realizadas en precarias condiciones, suponían un esfuerzo físico
agotador. Éste se vio agravado por las dolencias derivadas de la
exposición a la radiactividad, cuyas consecuencias ignoraban. La
radiactividad les produjo lesiones visibles en las manos, y sería en
último término la causante de la leucemia a consecuencia de la cual
murió Marie Curie.
Irónicamente, las propiedades curativas que, en un principio, se atribuyeron a la radiactividad, contribuyeron a su fama. El reconocimiento científico llegó en 1903 con la concesión de la medalla Davy de la Royal Society y del Premio Nobel de Física, que compartieron con Becquerel. Los Curie no acudieron personalmente a recogerlo a Estocolmo debido a que su salud, en el caso de Marie, se había visto afectada además por la pérdida de un hijo nacido prematuramente.
Irónicamente, las propiedades curativas que, en un principio, se atribuyeron a la radiactividad, contribuyeron a su fama. El reconocimiento científico llegó en 1903 con la concesión de la medalla Davy de la Royal Society y del Premio Nobel de Física, que compartieron con Becquerel. Los Curie no acudieron personalmente a recogerlo a Estocolmo debido a que su salud, en el caso de Marie, se había visto afectada además por la pérdida de un hijo nacido prematuramente.
La fama
Los efectos de la
recepción del Nobel resultaron abrumadores para los Curie, que se vieron
convertidos en foco de la atención pública por las expectativas
despertadas por los fenómenos radiactivos. Con todo le valieron a Pierre
la creación en 1904 de una cátedra específica para él, dotada de un
laboratorio del que Marie se haría cargo. Ese mismo año, un industrial
francés creó una fábrica destinada a la obtención del radio recurriendo a
los consejos del matrimonio. Aunque nunca dispusieron de los recursos
necesarios para dotarse de un laboratorio adecuado a sus necesidades,
los Curie siempre se negaron a patentar la producción comercial de la
sustancia.
En 1906 Pierre Curie murió trágicamente
en París atropellado por un carruaje; el suceso transformó a Marie en
una persona distante hasta de sus amigos (pero no de sus hijas), aunque
prosiguió su trabajo y sucedió a su marido en la cátedra que sólo había
podido ocupar durante año y medio,
convirtiéndose de esta manera en la
primera mujer de Francia que accedía a la enseñanza superior. En 1910
publicó el Tratado sobre la radiactividad y en 1911 preparó un patrón internacional del radio que depositó en la Oficina Internacional de Pesos y Medidas de París.
MARIA CURIE, RECIBIO DOS PREMIOS NOBEL 10/12/20
Ese
año recibió por segunda vez el Premio Nobel, en esta ocasión de
química, por el descubrimiento del radio y del polonio; era la primera
vez que un científico merecía por dos veces el galardón. Parece que en
la decisión de la Academia Sueca pudo influir que hubiera fracasado la
candidatura de Marie Curie para la Academia de las Ciencias francesa,
así como el hecho de haber sido víctima de un escándalo periodístico a
propósito de su relación sentimental con Paul Langevin, físico francés que había sido discípulo de Pierre Curie.
Irene y Marie Curie en el Instituto del Radio (1921) |
En
la mayoría de países europeos se empezaron a crear institutos del
radio, ante su plausible utilidad en la curación del cáncer. La propia
Marie Curie aceptó la dirección honoraria del que se inauguró en
Varsovia en 1913; en julio del siguiente año se terminó en París la
construcción de un laboratorio consagrado al estudio de la
radiactividad, el Instituto del Radio, por un acuerdo entre el Instituto
Pasteur y la Sorbona, con una sección dedicada a la investigación
médica y otra reservada a la física y la química, dirigida por Marie
Curie. Durante la Primera Guerra Mundial creó, con la ayuda de donativos
privados, un equipo de expertos en técnicas radiográficas y, con la
colaboración de su hija Irene, puso en funcionamiento más de doscientos
vehículos radiológicos; madre e hija se desplazaron hasta el frente para
enseñar a los médicos los nuevos métodos y técnicas de la radiología.
En
mayo de 1921 Marie Curie realizó, en compañía de sus hijas, una gira
triunfal por Estados Unidos con objeto de recoger el gramo de radio
(valorado por entonces en cien mil dólares) cuya adquisición había hecho
posible la suscripción popular promovida por una periodista. A su
regreso comenzaron a manifestarse en Marie los primeros síntomas de que
padecía cataratas, y la sospecha de que las emanaciones de radio podían
producir algo más que quemaduras en los dedos empezó a tomar cuerpo,
pese a que la esperanza de que tuvieran un efecto permanente sobre las
células cancerosas estaba entonces en su apogeo.
Curie y el físico Robert Millikan en el Congreso de Física Nuclear de Roma (1931) |
En 1922 fue invitada a formar parte de la Comisión para
la Cooperación Intelectual creada por la Sociedad de Naciones, de la que
ocupó la vicepresidencia. En 1925 su hija Irene Curie contrajo matrimonio con el físico francés Frédéric Joliot;
ambos descubrieron en enero de 1934 la radiactividad artificial,
descubrimiento por el que recibirían en 1935 el Premio Nobel de química,
el tercero de los merecidos por la familia. Pocos meses después del
descubrimiento, la salud de Marie Curie se deterioró definitivamente.
Creyendo que se trataba de una inflamación de antiguas lesiones
tuberculosas, fue conducida a un sanatorio en Sancellemoz; allí se le
diagnosticó una anemia perniciosa, y falleció el 4 de julio de 1934. Su
hija Irene murió asimismo de leucemia en 1956; su marido reconoció que
la muerte era consecuencia de la radiación, aunque sostuvo que la
afección hepática que le costaría a él mismo la vida dos años más tarde
no tenía nada que ver con la radiactividad.
Cuando, durante la Primera Guerra Mundial,
Marie recorrió los hospitales de campaña para ayudar a los cirujanos
con las nuevas técnicas radiológicas (gracias a los rayos X podían
descubrirse balas y fragmentos de metralla ocultos en los heridos), su
ayuda inestimable hizo que se la empezase a llamar "Suprema Bienhechora
de la Humanidad". Marie siempre rechazó estas manifestaciones, que
consideraba inmerecidas: seguía siendo tan modesta y discreta como
cuando sólo era una joven estudiante polaca en la Sorbona. Einstein,
que la conoció una vez terminada la guerra y mantuvo con ella una
fructífera relación científica, afirmó: "Madame Curie es, de todos los
personajes célebres, el único al que la gloria no ha corrompido".
Increíble la fortaleza de su voluntad, a pesar de los múltiples hechos dolorosos de su vida y de la época en que las mujeres estaban, casi siempre, en un segundo plano.
ResponderEliminarGracias por tan interesante información!